Las pruebas de estas emisiones, a través de un sistema de medición remota, analizaron camiones Euro VI -la última norma europea sobre contaminación atmosférica para estos vehículos- durante tres años, entre 2017 y 2019, y confirmaron que el 29 % de los 587 “son altos emisores de NOx”, lo que constituye un “hecho grave” al contribuir a un “problema de salud pública que provoca la muerte prematura de 50.000 europeos cada año“.