En los últimos meses, los precios de la electricidad y el gas natural en Europa han alcanzado niveles que nunca antes se habían registrado. Esto ha generado una gran preocupación en toda la sociedad. Su efecto sobre la renta disponible de los hogares y sobre los costes de las empresas pone en riesgo la recuperación tras el parón de las economías en 2020 ligado a la pandemia.
Pese a su gravedad, la actual crisis de precios energéticos está motivada por factores de carácter coyuntural. Se inició por una tensión creciente entre la oferta y la demanda en el mercado global de gas natural desde finales de 2020 que dio lugar a una acusada escasez de oferta a lo largo de 2021.