Astrónomos húngaros detectaron el pasado viernes 11 de marzo un nuevo asteroide: 2022 EB5, de entre dos y cuatro metros de diámetro. En menos de dos horas chocó contra la atmósfera terrestre y se desintegró cerca de Jan Mayen, una remota isla noruega. Es la quinta vez que se descubre un objeto de este tipo poco antes de entrar en la capa gaseosa de nuestro planeta.