Hace unos meses en redes sociales se viralizó una imagen: miles y miles de toneladas de ropa, zapatos y textiles para el hogar se acumulan en el desierto chileno de Atacama. No es el único gran basurero textil del mundo. El fast fashion, el consumo rápido de moda, ahoga el planeta. Frente a las tradicionales dos colecciones anuales, actualmente las grandes firmas lanzan productos nuevos cada 15 días. Cada europeo compra 26 kilos de ropa al año y desecha 11, según la Unión Europea.